miércoles, 4 de abril de 2012

Momentos

Ayer el Ayuntamiento de Córdoba decidió abandonar en otras manos su Escuela Infantil y su Centro de mayores. Dicen que no hay dinero y que el poco que tenemos, no está para gastarlo en una correa de transmisión de futuros Fideles y Chés Guevaras. Que hay otras prioridades. Por ejemplo: otra semifinal de la Copa Davis o quizás alguna subvención que otra a los grupos cofrades. Al fin y al cabo, los niños y niñas del Guadalquivir (y sus viejos) tienen ya las calles para formarse y pasear, que todo el mundo se queja de todo. Que esas calles son lo que son, ya se sabe; pero, por supuesto, ese inconveniente no es culpa del actual Consistorio ni de las familias que pagan sus impuestos y dejan a sus hijos en guarderías rodeadas de árboles.
Hoy nos hemos enterado de que Córdoba es la ciudad andaluza a la que menos dinero destinan los Presupuestos del Estado, esos que usted y yo esperábamos entre la certeza de lo que se nos venía encima y la duda sobre si existirían de verdad. Debe ser, me he dicho yo entre croqueta y croqueta, que vivimos en la ciudad menos necesitada de ellos, ya que, como su objetivo no es crear empleo, para qué iban a esmerarse con una población que posee un honroso segundo puesto en el ranquing del desempleo andaluz (que no es lo mismo que decir en el del País Vasco)
Mañana seguramente tendremos noticias sobre el libro de instrucciones que ¿se regalará? a cada ciudadano de Córdoba, junto con su diario favorito, y que nos ilustrará sobre cómo hemos de vivir a partir de ahora para seguir siendo felices y continuar con el sentimiento de orgullo de lo que fuimos hace más de doce siglos. En él seguro que encontramos la letra del himno del Córdoba CF, alguna frase de Séneca, referencias a nuestro pasado histórico, espectaculares fotos de la Semana Santa y la Feria y un par de proclamas del Presidente de los empresarios explicando que no es que ellos no hayan sabido labrarnos un mejor futuro, es que entre tanto ir y venir a hoteles de lujo, tanta compra de apartamentos, chalés en la Sierra y coches de alta gama y tanto ocio que hay por aquí, no han tenido tiempo de convertirse en motores de la economía. Quizás regalen también un CD con el "Soy Córdobés" versionado por artistas reconocidos. Yo he pensado que, cuando lo tenga, voy a ponerlo debajo de mi almohada, a ver si se me pega algo, dejo de pensar en eso de los malos tiempos que le están cayendo a la lírica y me convierto en una parada presumida; parada, sí, pero convencida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario